Las arrugas son surcos, marcas o pliegues que se producen en nuestra piel; la piel es el mayor órgano de nuestro cuerpo: pesa alrededor de 5 kg y aisla nuestro organismo, protegiéndolo de agentes externos.
Las arrugas salen por diversos factores, pero el principal es la edad: cuanto mayores nos hacemos, nuestra piel va envejeciendo y poco a poco va perdiendo su elasticidad, se vuelve más delgada y las arrugas son las consecuencias de este proceso natural.
Pero hay otros factores que también ayudan a la aparición de arrugas, como consecuencia del deterioro prematuro de la piel:
- la exposición solar: el sol es mal amigo de la piel: la reseca y la mancha. Por eso es muy importante que cuando tomemos esos baños del sol, cubramos toda nuestra piel con un buen protector solar y evitemos las horas de mayor sol y calor.
- el tabaco, la contaminación: fumar acelera el envejecimiento de la piel, además de ser muy peligroso para nuestro organismo. El tabaco produce falta de circulación, lo que provoca arrugas. También la contaminación, los humos ayudan a deteriorar la piel.
- el estrés: situaciones de muchos nervios o angustia no ayudan a la relajación de la piel y de los músculos faciales.
- la alimentación: una dieta no adecuada, con muchos componentes grasos no ayuda a nutrir bien la piel.
Aunque poco o nada podemos hacer contra el envejecimiento natural de nuestra piel por el paso de los años, siguiendo unas pautas podemos ayudar a nuestra piel a sentirse mejor, lo que mejorará nuestro organismo y bienestar.Comer fruta y verdura es muy aconsejable, alimentos que contengan la vitamina C, así como beber mucha agua.
Actualmente hay muchas cremas protectoras de la piel, no sólo para el sol, sino también para el cuidado diario, tanto para hombre como para mujer. Además del cuidado con el sol y el no fumar, claro está.
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